Si quieres criar a un niño para que se convierta en un buen hombre, enséñale virtud.
Una reflexión del Padre Bill Peckman, que ha compartido en su cuenta de Facebook, acerca de lo que significa la ‘masculinidad’ y de criar niños para que se conviertan en hombres de Dios:
Voy a adentrarme en todo este asunto de la ‘masculinidad tóxica’ solo para decir esto:
Si eres un católico y quieres criar a un joven… enséñale virtud.
Enséñale prudencia, para que sepa cómo ser sabio y directo al tomar decisiones.
Enséñale templanza, para que sepa que no es un esclavo de sus impulsos, cómo aplacar su apetito para esta en comunión con la santidad.
Enséñale justicia, para que sea atento con las necesidades de los demás, y que trate con respeto y dignidad a las personas en su vida.
Enséñale fortaleza, para que sea valiente y se pueda contar en que va a hacer lo correcto a pesar de que esto conlleve un sacrificio para él. Enséñale la necesidad de ser noble.
Enséñale fe, para que no deje que la moralidad corrosiva de este mundo destruya su relación con Dios. Esa relación, si es fuerte, impactará de manera positiva todas las otras relaciones que tenga.
Enséñale esperanza, para que pueda ver más allá del momento inmediato, y vea al largo plazo. Enséñale esto para que no se deje esclavizar por lo que es popular en el momento.
Enséñale amor, para que pueda abrazar la abnegación necesaria para ser un hombre real. Enséñale a ser un héroe. Porque donde está ausente el amor, también lo está el heroísmo verdadero.
Haz esto y criarás a un niño que se convertirá en un hombre que no usará a los demás como objetos, no los intimidará ni tratará de destruirlos. Criarás a un hombre y no solo a un niño crecido.
Haz esto y criarás el tipo de hombre que es un gran líder, un gran esposo, un gran padre, o un gran sacerdote.